La vibración energética
es el movimiento interno que tiene cada cuerpo; se da por el movimiento del
electrón alrededor del átomo y que todo cuerpo lo posee ya que está en vibración
constante. La vibración de todo cuerpo puede ser captada por el aura. El Aura (ese campo
electromagnético que rodea a cada ser), está compuesto por numerosas líneas de
fuerzas, su sustancia proviene de la Luz. Su volumen es variable, así como
también lo es su color.
Jasmuheen (Ellen Greve),
en su libro “Vivir de luz” propone alimentarse única y exclusivamente de luz,
partiendo de la desactivación del sistema digestivo y la activación del sistema
endocrino, con una preparación previa que implica sanación y limpieza del
cuerpo físico y espiritual a través de una serie de tareas y rituales
destinados a su desarrollo.
EL principio de
Vibración dice que " Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra".
Bajo este principio, está todo lo que existe. Para los más gnósticos ésta
existencia se origina y termina en la luz y por ellos la importancia de ésta y
cómo ella nos afecta en la percepción de la materia; en específico, los colores
que se desprenden de la reflexión de la luz.
La energía de los
alimentos, tiene una vibración cromática determinada por sus compuestos. Si
dejamos que sean nuestros instintos y naturaleza quienes dictaminen lo que
debemos o no comer, podríamos ver resultados interesantes al momento de elegir
dichos alimentos, de acuerdo a las necesidades del alma y el cuerpo.
“En la actualidad el ser humano está en un estado de vibración
de 35.000 átomos ciclo por segundo que depende de su frecuencia de vibración
que sería la velocidad de rotación y amplitud del electrón alrededor del átomo,
o sea, a mayor velocidad y amplitud del electrón alrededor del átomo, mayor
frecuencia vibratoria y a menor velocidad y amplitud del electrón alrededor del
átomo, menor frecuencia vibratoria, la menor frecuencia vibratoria podría
representarse con el color negro y al mayor por el color blanco, que representa
la máxima pureza, el estado del espíritu.” (http://bit.ly/LMle9O)
En la cultura maya, el
centro de su universo giraba alrededor del maíz y sus distintas facultades
tanto energéticas como alimenticias.
“Te invito a agarrar el
maíz y hacer como los mayas, dibuja el camino al cielo. Para ello tienes tres
opciones una con la mente, otra con el corazón y otra con la realidad: Lo
puedes hacer en un jardín o patio si lo tienes, demarca la distancia de manera
imaginaria que consideres de la tierra al cielo y dibuja un camino con maíz no de
forma recta sino serpentina. Con el corazón debes sentir el camino. Y con la
mente tienes que divisar el camino” (http://bit.ly/Lr6aS8)
¡Hasta la próxima semana!
*Diseñador Gráfico